Un espacio para las empresas globales en Málaga TechPark

La última actividad del Programa Líderes  de Colombia 2022 llevó a Sergio Pachón, Maite Muñiz y Óscar Giraldo a las afueras de Málaga para conocer el Málaga TechPark. Una instalación de más de dos millones de metros cuadrados en el que conviven la naturaleza con empresas de múltiples sectores, especialmente TIC, blockchain y ciberseguridad.

Un entorno natural que le encantó a Maite para trabajar y que, como decía la Subdirectora de Transferencia de Tecnología y Relaciones Internacionales del Málaga TechPark, Sonia Palomo, “ayuda a quitar los sin sabores de los despachos”. En la sede social del Parque, un antiguo cortijo usado para el cuidado de animales y el único origina de toda la instalación, fue donde tuvo lugar el diálogo.

El primero en tomar la palabra fue el Secretario General de la Fundación Consejo España-Colombia, el Embajador Carlos Abella y de Arístegui para explicar las labores que realiza la Fundación Consejo y los lazos que unen a ambos países. Después tomó el relevo Sonia Palomo para explicarle a los tres Líderes Colombianos los orígenes del Parque Tecnológico, que se remontan a 1988 cuando se planteó su creación en Andalucía. Un año después se firmó el convenio entre el Gobierno Regional y el local y no fue hasta aquel histórico año 1992 que se inauguró.

La clave de la expansión del Parque Tecnológico tuvo lugar en 1996 cuando la Universidad de Málaga sacó parte de sus oficinas del campus al Parque. Maite, Sergio y Óscar abrían sus ojos de par en par cuando escucharon la dimensión del Málaga TechPark: Más de 620 empresas, 23.000 trabajadores y 2.000 estudiantes. Su actividad supone el 20% del PIB de la ciudad de Málaga, el 9% de la provincia y en torno al 2’8% de Andalucía.

Un modelo a seguir que han exportado a otros lugares con múltiples colaboraciones, incluidos tres campus en Colombia. Y en esa colaboración entre ambos países los Líderes y la subdirectora coincidieron en la necesidad de formar ingenieros, una profesión que se ha convertido en una de las más demandadas, especialmente la programación. Un problema común en las startups de nuestros Líderes y que confirmaban desde el TechPark, donde dejaban otro dato que volvía a sorprender a Óscar, Sergio y Maite: De los 23000 trabajadores del Parque, unos 14.000 son ingenieros.

La conversación derivó hacia las condiciones que el Parque Tecnológico de Málaga le pone a las empresas para poder asentarse en sus instalaciones, “básicamente dos: que sean innovadoras y que respeten el medio ambiente”. El interés de los Líderes avanzó hacia una iniciativa de la SEGIB encabezada por su anterior secretaria general, Rebeca Grynspan, de tejer una red para unir parques tecnológicos con Iberoamérica. 

En ese punto, Óscar Giraldo se lamentaba de que “en Colombia no cuajen los parques tecnológicos”. Algo que ha sufrido en primera persona en Manizales, “para que estos parques funcionen tienen que dar iniciativas para que las empresas se asienten en ellos”. Sin embargo, a Maite Muñiz lo que más le llamaba la atención del Málaga TechPark es “la situación del parque a las afueras, que además puede ser algo beneficioso para sus trabajadores”.

En el diálogo entre los Líderes y la representante del Parque Tecnológico coincidieron en que “Colombia es un país que a nuestras empresas (las españolas) les atrae. Uno de los ejemplos son las actividades que realiza la Cámara de Comercio para organizar expediciones allí”. La Subdirectora escuchó atenta a qué se dedican las startups de nuestros tres líderes, prometiendo ponerles en contacto con alguna de las empresas que realizan su actividad dentro de Parque Tecnológico.

Y con ese buen sabor de boca y un paseo por la zona ajardinada del Málaga TechPark se ponía el broche perfecto a una semana muy intensa y de la que Maite, Óscar y Sergio se llevan muchos recuerdos y muchas ganas de volver a España.

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